Los paperos de Cundinamarca hicieron de los parques de Bogotá el espacio de mercadeo que no tienen con motivo del bajo consumo y las importaciones… A su alrededor surgieron ideas para sustituir las redes de distribución que a ellos ya no les funcionan.
Los compradores de dos mil 500 bultos de papa está dispuestos a cargar y lavar su compra, porque se trata de la subsistencia de nuestros campesinos, que están pasando malos momentos por la pandemia.