En un minucioso seguimiento de los hechos ocurridos alrededor de los entrampamientos al acuerdo de paz, Noticias Uno encontró que el objetivo de estas operaciones no era solamente Santrich. A la JEP intentaron infiltrarla y contaminarla con cuatro millones de dólares, pero sólo un funcionario de bajo rango cayó.
Un fiscal de la jurisdicción especial, sin acceso a los magistrados, fue el que picó el anzuelo, tendido por agentes encubiertos extranjeros y de la Fiscalía de Martínez Neira, se llama Carlos Bermeo.