109 representantes a la Cámara autorizaron al nuevo registrador nacional para que contrate a dedo a 1.200 trabajadores para las próximas elecciones y a contratar sin cumplir requisitos de transparencia.
Aunque se supone que la transparencia y las elecciones son las que crean la paz, los liberales, conservadores, uribistas y de cambio radical piensan que los contratos del ramo deben protegerse como secreto militar y así lo avalaron.