La sesión que aprobó la reforma tributaria fue citada a las cinco de la mañana, pero comenzó a las cero horas y nueve minutos de antenoche lo que podría significar un nuevo vicio de forma.
El lapsus linguae que podría significar un vicio en el trámite de la ley se produjo en medio del afán de congresistas y ministros por salir a disfrutar de sus vacaciones de navidad.