El tercer pico de la pandemia en el país está golpeando más fuerte a Antioquia y Medellín, que ya vieron colapsar sus sistemas de salud, que siguen siendo de los mejores dotados del país y, sin bajar aún, perdieron la posibilidad de trasladar a sus pacientes a Bogotá, que dejó se recibirlos ante el aumento de las cifras locales.