La liberación de la religiosa colombiana Gloria Narváez no habría sido producto del trabajo inteligencia militar, como lo anunció ayer el presidente de Malí, sino de una larga negociación con los yihaidistas, por la libertad de un líder opositor y una ciudadana suiza.
La mujer suiza estaba en cautiverio desde 2016 y el político desde principios de este año. Luego de que Malí le abriera la puerta de la cárcel a 180 guerrilleros islámicos, ellos dos y la colombiana volvieron a la libertad.