La inflación disparada golpea a los hogares pobres con el doble de fuerza que a los de ingresos más altos. Con el precio del dólar han subido los gastos de los hogares en alimentación, arriendo y transporte.
La inflación disparada golpea a los hogares pobres con el doble de fuerza que a los de ingresos más altos. Con el precio del dólar han subido los gastos de los hogares en alimentación, arriendo y transporte.