Cuando el presidente Iván Duque dijo en el acto inaugural del Museo de la Memoria que el gobierno quiere avanzar en la construcción de la paz, un grupo de víctimas que asistía al evento la completó la frase diciendo: pero sin memoria.
La protesta de las víctimas no sólo tiene que ver con las posiciones negacionistas del director del Centro de Memoria, sino también con el nombramiento como director del museo de un museógrafo militar, que según las víctimas significa la entrega de la curaduría a un representante de un grupo específico de victimarios.