Mientras la búsqueda continúa en el Guaviare, en Villavicencio los familiares de los niños esperan noticias sobre ellos.
La abuelita y dos tíos de los cuatro menores confían en que las enseñanzas que desde muy temprano se les dan a los niños indígenas, les ayudarán a sobrevivir y también esperan ayuda sobrenatural.