Hay 37 mil hogares esperando que el gobierno desembolse los subsidios ya aprobados y otros 200 mil esperando no sólo que cedan la inflación y las tasas de interés, sino que el gobierno aclare cómo va a entregarlos.
Esos subsidios le permitirían al sector vivienda mantener su ritmo y, sino llegan, le significarían al país la pérdida de un millón y medio de empleos.