El expresidente Ernesto Samper acudió voluntariamente esta semana a la Comisión de la Verdad, en donde contó su versión sobre el magnicidio de Álvaro Gómez y sobre la investigación de este crimen, que nunca ha concluido.
Samper se refirió como conspiradores de sangre a los militares y civiles que complotaron contra su gobierno pretendiendo involucrar al líder conservador, que se negó secundarlos.