A Miami, que tiene uno de los grupos más radicales de la oposición a Gustavo Petro envió emisarios al partido de Charlotte para gritar Fuera Petro, y esta tarde en Miami puso a valor este avión sobre el estadio.
En Charlotte su grito no se escuchó, pero en Miami sí se vio. Junto con el momento en que una horda con uniforme amarillo intentó rebasar a la policía que organizaba la entrada al estadio, incluso con bebés de pañales, para colarse sin pagar boleta. Luego de esta acción, ya en el interior del estadio, se pudieron contar los interesados en politizar el partido: nueve en un estadio con capacidad para 65 mil espectadores.