Los influencers que hacían rifas en sus redes sociales y cuyas cuentas pidió bloquear el gobierno, deberán pagar el 14 por ciento del precio total de las boletas vendidas de cada sorteo.
El gobierno resolvió imponerles por decreto la tasa luego de que se hundiera la posibilidad de hacerlo en la Ley de Financiamiento que no se le aprobó en el congreso.