Cerca de 300 mujeres de las zonas Caribe, el bajo Cauca, Caquetá, putumayo, Antioquia, Santander y Norte de Santander se encontraron en una casa cultural de la localidad de bosa, en el sur de Bogotá, para exigir respeto por la vida de los líderes sociales y los derechos de los campesinos que siguen siendo objeto de ataque por parte de bandas del narcotráfico de y otros grupos armados ilegales .