Como en anteriores manifestaciones, en esta jornada de protestas se oyeron reclamos sobre educación, reforma pensional y dignidad agropecuaria. Como en ninguna marcha que se recordara, se sintieron rezos y bailes de taitas, médicos tradicionales y de otras autoridades, que con saberes ancestrales intentaron remover el espíritu de la tierra para sanarla, especialmente la que está bajo la Plaza de Bolívar y alrededores.