Hace tres semanas la vicepresidenta, junto con el jefe de su partido, Andrés Pastrana, dijo que se podría estar fraguando un fraude electoral con los votos del exterior. Hoy son sus contradictores los mayores denunciantes de estos posibles fraudes.
Un votante de Canadá llegó a la mesa de votación y le dijeron que ya su voto había sido depositado; un candidato hace campaña junto a la urna y en otras partes no hay mesas para tanta gente. Por primera vez se denuncia corrupción la votación en el exterior.