La biónica marcó un nuevo hito. Médicos e ingenieros lograron que los nervios del muslo de un mutilado pudieran enviar señales a una mano mecánica suficientes para moverse como una natural.
La biónica marcó un nuevo hito. Médicos e ingenieros lograron que los nervios del muslo de un mutilado pudieran enviar señales a una mano mecánica suficientes para moverse como una natural.