¿Usted estaría dispuesto a realizarse un examen para comprobar si en un futuro padecerá de Alzheimer? Este es el debate que enfrentan científicos y médicos expertos en Estados Unidos tras el lanzamiento de una prueba temprana por posible Alzheimer por parte de la farmacéutica Quest Diagnostics, que ha generado más dudas que certezas.
A pesar de no contar aún con la certificación de la Administración de Medicamentos y Alimentos de ese país, éste ya es el primer examen de sangre comercial que puede detectar niveles anormales de una proteína asociada con la enfermedad del Alzheimer y la demencia.
El análisis, denominado AD-Detect, cuesta $399 dólares y utiliza la misma tecnología que una prueba que farmacéuticas como Biogen o Eli Lilly comenzaron a vender para uso médico a principios de 2022.
Sin embargo, el debate médico persiste en la preocupación de que las personas que den positivo, pero no presenten síntomas, no puedan acceder a nuevos tratamientos y además que inicien alteraciones en su estilo de vida para buscar soluciones efectivas.
A la espera de una aprobación gubernamental, ya está en marcha la nueva generación de tratamientos dirigidos que pueden ayudar a estudiar las anomalías del Alzheimer en la humanidad