Concluyó en Bogotá el juicio a Francisco Ricaurte por los actos que como magistrado de la Corte Suprema lo involucraron en el cartel de la toga. En la audiencia se conoció cómo el cartel funcionaba en una oficina que él alquiló con el fiscal corrupto Luis Gustavo Moreno.
Entre los visitantes de la oficina mencionados en la audiencia están los otros cuatro condenados por el carrusel, pero también la expresidenta de la Corte Ruth Marina Díaz.