Un grupo de vigilantes que disfrazados con trajes militares atacó con machetes a los habitantes de la calle que dormían cerca a un centro comercial de Floridablanca, Santander, fue capturado por la Policía.
Vestidos uno con chaqueta militar y el otro con el uniforme de una empresa de vigilancia fueron presentados en el consejo de seguridad de esa ciudad como supuestos vigilantes informales, es decir, sin jefe reconocido ni responsable.