El consejo de Seguridad de Naciones Unidas hizo su examen anual al cumplimiento del acuerdo de paz de Colombia, con un balance alarmista sobre la desprotección de los firmantes y la violencia desbordada, por falta de presencia estatal.
Los miembros del Consejo se pronunciaron cada uno por su lado, Estados Unidos para pedir protección para minorías étnicas, Francia para pedir presencia estatal en zonas exFARC, Inglaterra preocupada por los asesinatos de firmantes y Rusia para pedir que se dialogue con el ELN.