El ministro de Defensa aseguró que fue porque un soldado le dijo que había noticias falsas sobre las fuerzas militares que él resolvió firmar un contrato de asesoría para hacerles creer a los colombianos que el Ministerio de Defensa estaba bajo ataque cibernético.
El mismo día, mientras la oficina de prensa del Ministerio de Defensa y las de las Fuerzas Armadas fingían el ataque, la Policía decía que sus servidores no reportaban nada anormal. La campaña tampoco demostró la falsedad de ninguna noticia.