En junio pasado seis funcionarios de la Unidad de Víctimas se reunieron con el testaferro de alias Memo Fantasma, quien ya escapaba de la Fiscalía que ordenó su captura en el proceso contra su jefe, para entregarle formalmente los bienes del mismo narcotraficante.
La Unidad de Víctimas tiene como función recibir los bienes incautados y monetizarlos para reparar a las víctimas, pero en vez de ello los ha entregado a secuestres y lo común es que éstos pertenezcan a la línea de mando del mismo criminal al que se le incautaron.