Quinientos campesinos e indígenas de Ituango, Antioquia, tuvieron que abandonar sus parcelas la semana pasada, por combates entre bandas de narcotraficantes y ahora están intentado un retorno, aunque sin garantías.
El párroco de la vereda de Santa Lucía dice que las casas se quedaron con candado y que las mascotas y animales de finca de los campesinos deambulan buscando cómo sobrevivir mientras los desplazados encuentran el camino de regreso.