La tecnología al alcance de las manos hizo posible el regreso de los restaurantes, pues ya es norma que todos brinden acceso a su menú por un código QR que evita el contacto físico con la carta, potencialmente transmisora del virus.
La tecnología al alcance de las manos hizo posible el regreso de los restaurantes, pues ya es norma que todos brinden acceso a su menú por un código QR que evita el contacto físico con la carta, potencialmente transmisora del virus.