El asesinato del activista comunitario Salvador Jaime ocurrió a unos 40 minutos del sitio en donde cayó Dimar Torres. Estos dos hechos guardan similitudes.
Tanto en uno como en otro caso, había militares cerca patrullando la región y, ante el ruido de los disparos, en ambos casos, las comunidades se encargaron de perseguir a los presuntos responsables y de capturarlos.