16 años después de que su hijo de 21 años desapareciera de su casa, su mamá, que nunca se cansó de buscarlo, recibió sus restos. Marlon fue asesinado pocos días después de su ausencia por los paramilitares que lo torturaron a tal grado que sorprendió a los investigadores. Él fue un falso positivo de Aguachica, Cesar.