La tentación de adquirir bienes o de comprar artículos a veces innecesarios, puede ser muy fuerte. Pero resulta más prudente, resistirse y no llegar al punto de ahogarse en deudas.
La tentación de adquirir bienes o de comprar artículos a veces innecesarios, puede ser muy fuerte. Pero resulta más prudente, resistirse y no llegar al punto de ahogarse en deudas.