A pesar de las objeciones de los congresistas a los que endulzó la industria azucarera, el impuesto saludable a las bebidas azucaradas se cobrará desde ayer.
Una congresista endulzada, de Cambio Radical, aseguraba que con el impuesto se trepaba el precio de la lonchera, pero la red de papas, los médicos y los tributaristas tienen claro que la lonchera con comida de paquete en el largo plazo costará en tratamientos contra la diabetes, la obesidad y otras enfermedades.