De nada le sirvió al excongresista Mario Castaño argumentar su propia obesidad para conseguir una cárcel VIP de político. La Corte Suprema lo mandó a una cárcel normal por 16 años luego de analizar la forma en la que él y el cartel que organizó en el Capitolio se saquearan los fondos de la paz, para hacerla trizas, los de la mitigación de desastres y los fondos de cultura para los municipios.